viernes, 30 de marzo de 2012

029.- ¿Qué dice el Credo largo de Nicea – Constantinopla?

29.- ¿Qué dice el Credo largo de Nicea – Constantinopla?

Creo en un solo Dios,
Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra,
de todo lo visible e invisible.

Creo en un solo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios,
nacido del Padre antes de todos los siglos:
Dios de Dios, luz de luz,
Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado,
de la misma naturaleza del Padre,
por quien todo fue hecho;
que por nosotros, los hombres,
y por nuestra salvación, bajó del cielo,
y por obra del Espíritu Santo se encarnó
de María, la Virgen,
y se hizo hombre;
y por nuestra causa fue crucificado
en tiempo de Poncio Pilato;
padeció y fue sepultado,
y resucitó al tercer día,
según las Escrituras,
y subió al cielo y está sentado
a la derecha del Padre;
y de nuevo vendrá con gloria
para juzgar a vivos y muertos,
y su reino no tendrá fin.

Creo en el Espíritu Santo,
Señor y dador de vida,
que procede del Padre y del Hijo,
que con el Padre y el Hijo
recibe una misma adoración y gloria,
y que habló por los profetas.

Creo en la Iglesia
que es una, santa, católica y apostólica.
Confieso que hay un solo Bautismo
para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos
y la vida del mundo futuro.

Amén. 





Realiza un acto de fe: reza el Credo acompañado por hermosas imágenes.



028.- ¿Qué dice la fórmula de fe de los apóstoles?

28.- ¿Qué dice la fórmula de fe de los apóstoles?

Creo en Dios, Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.

Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor,
que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó de entre los muertos,
subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios,
Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

Creo en el Espíritu Santo,
la santa Iglesia Católica,
la comunión de los santos,
el perdón de los pecados,
la resurrección de la carne
y la vida eterna. Amén. 




Luis Enrique Ascoy, artista cristiano, compuso esta hermosa versión del Credo, con una introducción que bien vale la pena escuchar.


La versión que se presenta a continuación cuenta con la participación de otros músicos cristianos como Daniel Poli, Martín Valverde, Ziza Fernándes y Kiki Troia.



027.- ¿Cómo surgieron las profesiones de fe?

27.- ¿Cómo surgieron las profesiones de fe?

L
as profesiones de fe se remontan a Jesús, que mandó a sus discípulos que bautizaran. En el bautismo debían exigir a las personas la profesión de una determinada fe, en concreto la fe en el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo (TRINIDAD).[188-191]

El germen de todas las fórmulas de fe posteriores es la fe en Jesús, el Señor, y el envío a la misión: «Id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo» (Mt 28,19). Todas las profesiones de fe de la Iglesia son desarrollo de la fe en este Dios trinitario. Comienzan con la confesión de la fe en el Padre, Creador y quien sostiene el mundo, se refieren luego al Hijo, por quien el mundo y nosotros mismos hemos encontrado la salvación, y desembocan en la confesión de fe en el Espíritu Santo, la persona divina por quien se da la presencia de Dios en la Iglesia yen el mundo.

026.- ¿Qué son las profesiones de fe?

26.- ¿Qué son las profesiones de fe?

L
as profesiones de fe son fórmulas sintéticas de la fe, que hacen posible una confesión común de todos los creyentes. [185-188, 192-197]

Este tipo de síntesis se encuentran ya en las cartas de san Pablo. La profesión de fe o credo de los apóstoles, de los primeros tiempos del cristianismo, tiene una categoría especial, porque es considerado como el resumen de fe de los apóstoles. La profesión de fe larga o símbolo de Nicea-Constantinopla tiene una gran autoridad, porque procede de los grandes concilios de la Cristiandad aún no dividida (Nicea en el año 325 y Constantinopla en el 381) y hasta el día de hoy constituye la base común de los cristianos de Oriente y Occidente. 



025.- ¿Para qué necesita la fe definiciones y fórmulas?

SEGUNDA SECCIÓN

La profesión de fe cristiana

25.- ¿Para qué necesita la fe definiciones y fórmulas?

En la fe no se trata de palabras vacías, sino de una realidad. A lo largo del tiempo se condensaron en la Iglesia fórmulas de la fe, con cuya ayuda contemplamos, expresamos, aprendemos, transmitimos, celebramos y vivimos esa realidad. [170-174]

Sin fórmulas fijas el contenido de la fe se disuelve. Por eso la Iglesia da mucha importancia a determinadas frases, cuya formulación precisa se logró en la mayoría de los casos con mucho esfuerzo, para proteger el mensaje de Cristo de malentendidos y falsificaciones. Las fórmulas de la fe son importantes especialmente cuando la fe de la Iglesia se traduce a las diferentes culturas y sin embargo tiene que mantenerse en su esencia. Porque la fe común es el fundamento de la unidad de la Iglesia. 

024.- ¿Qué tiene que ver mi fe con la Iglesia?

24.- ¿Qué tiene que ver mi fe con la Iglesia?

Nadie puede creer por sí solo, como nadie puede vivir por sí solo. Recibimos la fe de la Iglesia y la vivimos en comunión con los hombres con los que compartimos nuestra fe. [166-169, 181]

La fe es lo más personal de un hombre, pero no es un asunto privado. Quien quiera creer tiene que poder decir tanto «yo» como «nosotros», porque una fe que no se puede compartir ni comunicar sería irracional. Cada creyente da su asentimiento libre al «creemos» de la iglesia. De ella ha recibido la fe. Ella es quien la ha transmitido a través de los siglos hasta él, la ha protegido de falsificaciones y la ha hecho brillar de nuevo. La fe es por ello tomar parte en una convicción común. La fe de los otros me sostiene, así como el fuego de mi fe enciende y conforta a otros. El «yo» y el «nosotros» de la fe lo destaca la Iglesia empleando los confesiones de la fe en sus celebraciones: el credo apostólico, que comienza con «creo» (CREDO) y el credo de Nicea-Constantinopla, que en su forma original comenzaba con «creernos» (Credimus).



CREDO: (lat. credo = yo creo): la primero palabra del credo apostólico se convirtió en el nombre de las diferentes fórmulas de profesión de fe de la Iglesia, en las que se resumen de forma vinculante los contenidos esenciales de la fe.

023.- ¿Hay contradicción entre la fe y la ciencia?

23.- ¿Hay contradicción entre la fe y la ciencia?

No hay una contradicción irresoluble entre fe y ciencia, porque no puede haber dos verdades.
[159]

No existe una verdad de la fe que pudiera estar en conflicto con una verdad de la ciencia. Sólo hay una verdad, a la que se refieren tanto la fe como la razón científica. Dios ha querido tanto la razón, mediante la cual podemos conocer las estructuras razonables del mundo, como ha querido la fe. Por eso la fe cristiana fomenta y potencia las ciencias (naturales). La fe existe para que podamos conocer cosas que, aunque no son contrarias a la razón, sin embargo son reales más allá de la razón. La fe recuerda a la ciencia que no debe ponerse en el lugar le Dios y que tiene que servir a la creación. La ciencia tobe respetar la dignidad humana en lugar de atacarla. 





“Entre Dios y la ciencia no encontramos jamás una contradicción. No se excluyen, como algunos piensan hoy, se complementan y se condicionan mutuamente”.
Max Plank (1858-1947, físico, premio Nobel; fundador de la teoría cuántica) 

022.- ¿Cómo funciona la fe?

22.- ¿Cómo funciona la fe?

Quien cree busca una relación personal con Dios y está dispuesto a creer todo lo que Dios muestra (revela) de sí mismo. [150-15 2]

Al comienzo del acto de fe hay con frecuencia una conmoción o una inquietud. El hombre experimenta que el mundo visible y el transcurso normal de las cosas no pueden ser todo. Se siente tocado por un misterio. Sigue las pistas que le señalan la existencia de Dios y paulatinamente logra la confianza de dirigirse a Dios y finalmente de adherirse a él libremente. En el evangelio de san Juan leemos: «A Dios nadie lo ha visto jamás: Dios unigénito, que está en el seno del Padre, es quien lo ha dado a conocer» (Jn 1,18). Por eso debemos creer en Jesús, el Hijo de Dios, si queremos saber qué nos quiere comunicar Dios. Por eso creer es acoger a Jesús y jugarse toda la vida por él.
 

Muchas veces se relaciona la fe, únicamente, con un sentimiento. Al no alimentarla, no formarla, la fe puede resquebrajarse, diluirse.

Durante la adolescencia, las cosas se sienten y viven de una manera particular: intensas, fuertemente presentes en el corazón. Pero, al crecer, esos sentimientos comienzan a trasnformarse, parece que se pierden, pero, en realidad, se los vive en modo distinto.

Esto nos plantea la canción "Dime quién me lo robó". La problemática del crecimiento ligada a la crisis de fe durante la adolescencia.

021.- ¿Qué es la fe?

21.- ¿Qué es la fe?

L
a fe es saber y confiar. Tiene siete rasgos:

• la fe es un puro don de Dios, que recibimos, si lo pedimos ardientemente.

• la fe es la fuerza sobrenatural que nos es necesaria para obtener la salvación.

• la fe exige la voluntad libre y el entendimiento lúcido del hombre cuando acepta la invitación divina.

• la fe es absolutamente cierta, porque tiene la garantía de Jesús.

• la fe es incompleta mientras no sea efectiva en el amor.

• la fe aumenta si escuchamos con más atención la voz de Dios y mediante la oración estamos en un intercambio vivo con él.

• la fe nos permite ya ahora gustar por adelantado la alegría del cielo. [153-165, 179-180, 183-184]


Muchos dicen que creer les parece poco, que quieren saber. Pero la palabra «creer» tiene dos significados diferentes: cuando un paracaidista pregunta al empleado del aeropuerto: «Está bien preparado el paracaídas?», y aquél le responde, indiferente: «Creo que sí», no será suficiente para él; esto quiere saberlo seguro. Pero si ha pedido a un amigo que le prepare el paracaídas, éste te contestará a la misma pregunta: «Sí, lo he hecho personalmente. ¡Puedes confiar en mí!». Y el paracaidista replicará: «Te creo». Esta fe es mucho más que saber: es certeza. Y ésta es la fe que hizo partir a Abraham a la tierra prometida, ésta es la fe que hizo que los MÁRTIRES perseveraran hasta la muerte, ésta es la fe que aún hoy mantiene en pie a los cristianos perseguidos. Una fe que afecta a todo el hombre. 


“Creer en Dios quiere decir comprender que con las cosas del mundo no basta. Creer en Dios quiere decir comprender que la vida tiene un sentido”.


Ludwig Wittgenstein (1889-1951, filósofo austríaco)

“Credo, ut intelligam — Creo para comprender”.
San Anselmo de Canterbury (1033/34- 1109, Doctor de la Iglesia, teólogo relevante de la Edad Media) 


020.- ¿Cómo podemos responder a Dios cuando él se dirige a nosotros?

CAPÍTULO TERCERO

Los hombres responden a Dios

20.- ¿Cómo podemos responder a Dios cuando él se dirige a nosotros?

Responder a Dios es creer en él. [142-149]

Quien quiera creer necesita «un corazón atento» (1 Re 3,9). Dios busca de muchas maneras establecer contacto con nosotros. En cada encuentro humano, en cada experiencia conmovedora en la naturaleza, en cada aparente casualidad, en cada reto, en cada dolor, está escondido un mensaje de Dios para nosotros. De manera más clara aún nos habla cuando se dirige a nosotros en su palabra o en la voz de la conciencia. Nos habla como a amigos. Por ello debemos responderle también como amigos y creer en él, creer totalmente en él, aprender a comprenderle cada vez mejor y a aceptar sin reservas su voluntad.


“La fe es según su naturaleza la aceptación de una verdad que nuestra razón no puede alcanzar; sencillamente y necesariamente en función de un testimonio”.
BEATO JOHN HENRY NEWMAN (1801-1890, converso, más tarde cardenal de la Iglesia católica, filósofo y teólogo inglés).

Si tuviérais fe como un grano de mostaza, le diríais a aquel monte: «Trasládate desde ahí hasta aquí», y se trasladaría. Nada os sería imposible”. Mt 17,20 


La respuesta del hombre a Dios es posible ya que el hombre va en busca de quien es su origen y meta. Naturalmente el hombre se dirige en esa dirección, sólo tendrá que aprender a reconocer los signos de la presencia de su Creador.

Inspirándose en los libros de la sabiduría, Voz Dei compuso esta bella canción que nos ayuda a pensar el don de la fe: respuesta del hombre que tiene sed de Dios.

Libros Sapienciales

De sol a sol, labrando tierra tendrás tu pan.
Todos los ríos van al mar, pero éste nunca se llenará
Todos los ríos siempre volverán a donde salieron,
para comenzar a correr de nuevo.
Lo que siempre fue, lo mismo será,
lo que siempre hicieron, repetirán.

No olvidar, lo que ves ya se ha visto ya.
Tal vez un día lo sabrás, todo tiene un tiempo bajo el sol.
Porque habrá siempre tiempo de plantar y de cosechar,
tiempo de hablar, también de callar,
tiempo para guerra y tiempo de paz,
tiempo para el tiempo y un rato más.

Buenas y malas son, cosas que vivo hoy
No es esta tierra, no: sueño color azul
¿No es quizás, que no sé mirar: ¡cuánto, cuánto...
Hay a mi alrededor!
¡Más de lo que mis ojos pueden mirar, y llegar a ver!
Estas son razones que dicen que sólo sé,
que sé querer,
y que tengo a Dios, y tengo fe
y que doy amor, y puedo ser.

Sé que en algún lugar alguien me espera hoy.
Sé que ahora tengo yo alguien a quien buscar.
¿No es quizás, que ahora sé mirar?
¡Cuánto, cuánto... hay a mi alrededor!
¡Más de lo que mis ojos pueden mirar, y llegar a ver!
Estas son razones que dicen que sólo sé,
que sé querer,
y que tengo a Dios, y tengo fe,
y que doy amor, y puedo ser.

Vox Dei 1971 del Albun "La Biblia"
Letras de Ricardo Soulé, música de Willy Quiroga , Juan Carlos Godoy y Ricardo Soulé; orquestación de Roberto Lar.



miércoles, 21 de marzo de 2012

019 ¿Qué función tiene la Sagrada Escritura en la Iglesia?

19 ¿Qué función tiene la Sagrada Escritura en la Iglesia?

L
a Iglesia saca su vida y su fuerza de la Sagrada Escritura. [103-104, 131-133, 141]

Con la excepción de la presencia de Cristo en la sagrada Eucaristía, no hay nada que la Iglesia venere más reverentemente que la presencia de Cristo en la Sagrada Escritura. En la Santa Misa acogemos en pie el Evangelio, porque en las palabras humanas que escuchamos es Dios mismo quien nos habla.


“Toda la Escritura divina habla de Cristo, y toda la Escritura divina se cumple en Cristo”.
Hugo de San Víctor (1096 – 1141, monje agustino).

“La Sagrada Escritura no es algo que pertenezca al pasado. El Señor no habla en el pasado, sino que habla en el presente, él habla hoy con nosotros, nos concede su luz, nos muestra el camino de la vida, nos regala su comunión y nos prepara y nos abre así a la paz”.
BENEDICTO XVI, 20.03.2005

“Leer la Sagrada Escritura es pedir consejo a Cristo”.
San Francisco de Asís (1182-1226, “el mayor cristiano después de Cristo”, fundador, místico).



Biblia Católica para Jóvenes

Se trata de un hermoso emprendimiento, una nueva traducción de las Sagradas Escrituras en clave juvenil. Incluye comentarios, explicaciones, oraciones, siempre desde una mirada joven.

"Conoce la Palabra de Dios, ora con ella y vívela desde tu corazón"


Compartimos la canción de la Biblia Católica para Jóvenes, compuesta por Martín Valverde, titulada "Vívela".


Vívela

Vívela, conócela,
hazla parte de tu oración.
Es la Palabra de Vida.
Vívela desde tu corazón.

Toda escritura es inspirada por Dios
y es útil para enseñar.
Toda escritura es inspirada por Dios
para que seas perfecto y estés
preparado para hacer el bien.

Vívela, conócela,
hazla parte de tu oración.
Es la Palabra de Vida.
Vívela desde tu corazón.

Voy a darles un nuevo corazón
e infundirles un espíritu nuevo.
Les quitaré su corazón de piedra
e infundiré mi Espíritu en ustedes
para que vivan según mis mandamientos.

Vívela, conócela,
hazla parte de tu oración.
Es la Palabra de Vida.
Vívela desde tu corazón.

Al principio la Palabra existía
y la Palabra estaba junto a Dios.
Lo que hemos visto y oído anunciamos
pues la Palabra era Dios en verdad.
Lo cantamos para tu alegría completar.

Vívela, conócela...





018.- ¿Qué importancia tiene el Nuevo Testamento para los cristianos?

18.- ¿Qué importancia tiene el Nuevo Testamento para los cristianos?

En el NUEVO TESTAMENTO se completa la REVELACIÓN de Dios. Los cuatro evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan son el corazón de la Sagrada Escritura y el tesoro más preciado de la Iglesia. En ellos se muestra el Hijo de Dios tal como es y nos sale al encuentro. En los Hechos de los Apóstoles aprendemos acerca de los inicios de la Iglesia y de la acción del Espíritu Santo. En las cartas apostólicas se pone la vida de los hombres en todos sus aspectos ante la luz de Cristo. En el Apocalipsis vemos anticipadamente el fin de los tiempos. [124-127, 128-130, 140]

Jesús es todo lo que Dios nos quiere decir. Todo el ANTIGUO TESTAMENTO prepara la Encarnación del Hijo de Dios. Todas las promesas de Dios encuentran su cumplimiento en Jesús. Ser cristiano quiere decir unirse cada vez más profundamente con la vida de Cristo. Para ello hay que leer y vivir los evangelios. Madeleine Delbrél dice: «A través de su Palabra Dios nos dice quién es y lo que quiere; nos lo dice de manera definitiva y para cada día. Cuando tenemos en las manos el Evangelio deberíamos considerar que allí habita la Palabra que quiere hacerse carne en nosotros, apoderarse de nosotros para que comencemos de nuevo su vida en un lugar nuevo, en un tiempo nuevo, en un nuevo entorno humano».


NUEVO TESTAMENTO: La segunda parte de la Biblia. Contiene los textos propios del cristianismo, los cuatro Evangelios, los Hechos de los Apóstoles, catorce epístolas de San Pablo, siete epístolas católicas y el Apocalipsis.

“Sólo cuando encontramos al Dios vivo en Jesucristo aprendemos qué es la vida. No hay nada más hermoso que ser encontrado por el evangelio de Jesucristo”. Benedicto XVI, 24.04. 2005


Desconocer la Escritura es desconocer a Cristo”.
San Jerónimo (347-419, Padre de la Iglesia, Doctor de la Iglesia, exegeta y traductor de la Biblia). 


Para gustar las enseñanza del Nuevo Testamento, te invitamos a escuchar y ver este video inspirado en el relato del "Padre misericordioso", parábola narrada en el Evangelio de Lucas (15, 11-32).

La canción se titula "Vuelve a casa".


017.- ¿Qué importancia tiene el Antiguo Testamento para los cristianos?

17.- ¿Qué importancia tiene el Antiguo Testamento para los cristianos?

En el ANTIGUO TESTAMENTO Dios se muestra como Creador y como quien conserva el mundo y es guía y educador de los hombres. También los libros del Antiguo Testamento son Palabra de Dios y Sagrada Escritura. Sin el Antiguo Testamento no se puede comprender a Jesús. [121-123, 128-130, 140]

En el ANTIGUO TESTAMENTO comienza la gran historia del aprendizaje de la fe, que da un giro decisivo en el NUEVO TESTAMENTO y que llegará a su meta con el fin del mundo y el retorno de Cristo. Y en esto el Antiguo Testamento es mucho más que un mero preludio del Nuevo. Los mandamientos y las profecías del pueblo de la antigua alianza y las promesas que se contienen en ellas para todos los hombres, no han sido revocados. En los libros de la antigua alianza se encuentra un tesoro insustituible de oración y de sabiduría; especialmente los salmos pertenecen a la oración cotidiana de la Iglesia.


ANTIGUO TESTAMENTO (lat. testamentum = legado): la primera parte de la Biblia y la Sagrada Escritura de los judíos. El antiguo Testamento de la Iglesia católica abarca 46 libros: escritos históricos, proféticos y la literatura sapiencial junto con los salmos.

“El Nuevo Testamento está escondido en el Antiguo, mientras que el Antiguo se hace manifiesto en el Nuevo”. San Agustín (354-430, Doctor de la Iglesia, el escritor y teólogo más importante de la Iglesia primitiva).

016 ¿Cómo se lee correctamente la Biblia?

16 ¿Cómo se lee correctamente la Biblia?

La Sagrada Escritura se lee correctamente en actitud orante, es decir, con la ayuda del Espíritu Santo, bajo cuya influencia se ha formado. Es la Palabra de Dios y contiene la comunicación decisiva de Dios para nosotros. [109-119, 137]

La BIBLIA es como una larga carta de Dios a cada uno de nosotros. Por eso debo acoger las Sagradas Escrituras con gran amor y con reverencia. En primer lugar se trata de leer realmente la carta de Dios, es decir, no de escoger detalles y dejar de lado el conjunto. El conjunto debo interpretarlo desde su corazón y misterio: Jesucristo, de quien habla toda la Biblia, también el ANTIGUO TESTAMENTO. Por tanto debo leer las Sagradas Escrituras en la misma fe viva de la Iglesia, de la cual han nacido.


LOS LIBROS DE LA BIBLIA (Canon)

Antiguo Testamento (46 libros)

Libros históricos

Génesis (Gén), Exodo (Éx), Levítico (lev), Números (Núm), Deuteronomio (Dt).
Josué (Jos), Jueces (Jue), Rut (Rut), 1 Samuel (1 Sam), 2º Samuel (2 Sam), 1º Reyes (1 Re), 2º Reyes (2 Re), 1º Crónicas (1 Crón), 2º Crónicas (2 Crón), Esdras (Esd), Nehemías (Neh), Tobías (Tob), Judit (Jdt), Ester (Est), 1º Macabeos (1 Mac), 2º Macabeos (2 Mac).

Libros sapienciales

Job (Job), Salmos (Sal), Proverbios (Prov), Eclesiastés (Ecl), Cantar de los Cantares (Cant), Sabiduría (Sab), Eclesiástico (Eclo).

Libros proféticos

Isaías (Is), Jeremías (Jer), Lamentaciones (Lam), Baruc (Bar), Ezequiel (Ez), Daniel (Dan), Oseas (Os), Joel (Jl), Amos (Am), Abdías (Abd), Jonás (Jon), Miqueas (Miq), Nahúm (Nah), Habacuc (Hab), Sofonías (Sof), Ageo (Ag), Zacarías (Zac), Malaquías (Mal).

Nuevo Testamento (27 libros)

Los Evangelios

Mateo (Mt), Marcos (Mc), Lucas (Lc), Juan (Jn)

Hechos de los Apóstoles (Hch)

Epístolas de san Pablo
Romanos (Rom), 1º Corintios (1 Cor), 2º Corintios (2 Cor), Gálatas (Gál), Efesios (Ef), Filipenses (Flp), Colosenses (Col), 1ª Tesalonicenses (1 Tes), 2ª Tesalonicenses (2 Tes), 1º Timoteo (1 Tim),
2º Timoteo (2 Tim), Tito (Tit), Filemón (Flm), Hebreos (Heb).

Epístolas católicas
Santiago (Sant), 1º Pedro (1 Pe), 2ºPedro (2 Pe), 1º Juan (1 Jn), 2º Juan (2 Jn), 3º Juan (3 Jn), Judas (Jds).

Apocalipsis (Ap).



lunes, 12 de marzo de 2012

015.- ¿Cómo puede ser «verdad» la Sagrada Escritura, si no todo lo que contiene es correcto?

15.- ¿Cómo puede ser «verdad» la Sagrada Escritura, si no todo lo que contiene es correcto?

La BIBLIA no pretende transmitirnos precisión histórica ni conocimientos de ciencias naturales. Los autores eran además hijos de su tiempo. Compartían las representaciones culturales de su entorno y en ocasiones estaban anclados en sus limitaciones. Pero todo lo que el hombre debe saber acerca de Dios y del camino de la salvación se encuentra con certeza infalible en la Sagrada Escritura. [106-107, 109] 



El valor de la palabra en esta hermosa canción de Carlos Varela.

Una palabra

Una palabra no dice nada
y al mismo tiempo lo esconde todo,
igual que el viento esconde el agua,
como las flores que esconden lodo.

Una mirada no dice nada
y al mismo tiempo lo dice todo,
como la lluvia sobre tu cara
o el viejo mapa de algún tesoro.

Como la lluvia sobre tu cara
o el viejo mapa de algún tesoro.

Una verdad no dice nada
y al mismo tiempo lo esconde todo,
como una hoguera que no se apaga,
como una piedra que nace polvo.

Si un día me faltas no seré nada
y al mismo tiempo lo seré todo,
porque en tus ojos están mis alas
y está la orilla donde me ahogo.

Porque en tus ojos están mis alas
y está la orilla donde me ahogo.


014.- ¿Es verdadera la Sagrada Escritura?

14.- ¿Es verdadera la Sagrada Escritura?

«Los libros sagrados enseñan sólidamente, fielmente y sin error la verdad, porque escritos por inspiración del Espíritu Santo, tienen a Dios como autor» (Concilio Vaticano II, DV 11). [103-107]


Ni la BIBLIA cayó ya acabada del cielo ni fue dictada a unos escribas autómatas. Más bien Dios «se valió de hombres elegidos, que usaban de todas sus facultades y talentos; de este modo, obrando Dios en ellos y por ellos, como verdaderos autores, pusieron por escrito todo y sólo lo que Dios quería» (Concilio Vaticano II, DV 11). Para que determinados textos fueran reconocidos como Sagrada Escritura se requería además la aceptación universal en la IGLESIA. En las comunidades debía existir el consenso: «Sí, Dios nos habla a través de estos textos; esto está inspirado por el Espíritu Santo». Desde el siglo IV está establecido en el CANON DE LAS SAGRADAS ESCRITURAS cuáles de los muchos textos cristianos primitivos están inspirados realmente por el Espíritu Santo. 

Fuente: Revista Umbrales


INSPIRACIÓN (lat.: inspiratio = inspiración): la influencia de Dios sobre los redactores humanos de la Biblia, de modo que es Dios mismo quien es considerado el autor de los libros sagrados.

CANON (lat. canon = cordel de medir, regla): La determinación vinculante de los escritos sagrados que pertenecen a la Biblia en el Antiguo y en el Nuevo Testamento. 

013.- ¿Se puede equivocar la Iglesia en cuestiones de fe?

13.- ¿Se puede equivocar la Iglesia en cuestiones de fe?

L
a totalidad de los fieles no puede equivocarse en la fe, porque Jesús prometió a sus discípulos que les enviaría el Espíritu de la verdad, que los sostendría en la verdad (Jn 14,17). [80-82, 85-87, 92, 100]

Así como los discípulos creyeron de corazón en Jesús, un cristiano cuando pregunta por el camino de la vida puede fiarse completamente de la Iglesia. Dado que Jesús mismo encargó a sus APÓSTOLES el ministerio de la enseñanza, la Iglesia tiene un MAGISTERIO y no puede callar. Ciertamente miembros aislados de la Iglesia pueden equivocarse e incluso cometer faltas graves, pero en su conjunto la Iglesia no puede desviarse de la verdad de Dios. La Iglesia es portadora a través de los tiempos de una verdad viva que es mayor que ella misma. Se habla del depositum fidei, del depósito de la fe que hay que custodiar. Si esa verdad es negada o deformada públicamente, la Iglesia debe hacer resplandecer de nuevo «lo que se ha creído en todas partes, siempre y por todos» (san Vicente de Lérins).


APÓSTOL: (grieg. apostolos = enviado, mensajero): En el Nuevo Testamento es en primer lugar la denominación de aquellos doce hombres que fueron llamados por Jesús a ser sus colaboradores más íntimos y sus testigos. También Pablo se consideró un apóstol elegido por Jesús.

MAGISTERIO: Denominación del oficio de la Iglesia católica de exponer la fe, de interpretarla bajo el auxilio del Espíritu Santo y de protegerla de falsificaciones. 

012.- ¿Cómo sabemos qué es lo que pertenece a la verdadera fe?

12.- ¿Cómo sabemos qué es lo que pertenece a la verdadera fe?

L
a verdadera fe la encontramos en la Sagrada Escritura y en la Tradición viva de la Iglesia. [76, 80-82, 85-87, 97, 100]

El Nuevo Testamento ha surgido de la fe de la Iglesia. Escritura y Tradición van unidas. La transmisión de la fe no se da en primer lugar a través de textos. En la Iglesia antigua se decía que la Sagrada Escritura estaba escrita «más en el corazón de la Iglesia que sobre pergamino». Ya los discípulos y los apóstoles experimentaron la nueva vida ante todo a través de la comunión de vida con Jesús. A esta comunión, que se continuó de un modo diferente tras la Resurrección, invitaba la Iglesia naciente a los hombres. Los primeros cristianos «perseveraban en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en la fracción del pan y en las oraciones» (Hch 2,42). Estaban unidos entre sí y sin embargo tenían espacio para otros. Esto es lo que constituye la fe hasta hoy: los cristianos invitan a otros hombres a conocer una comunión con Dios, que desde los tiempos de los apóstoles se ha mantenido inalterada en la Iglesia católica. 

011.- ¿Por qué transmitimos la fe?

11.- ¿Por qué transmitimos la fe?

Transmitimos la fe porque Jesús nos encarga: “Id pues, y haced discípulos a todos los pueblos” (Mt 28,19). [91]

Ningún cristiano auténtico deja la transmisión de la fe sólo en manos de los especialistas (maestros, sacerdotes, misioneros). Uno es cristiano por los demás. Esto quiere decir que todo cristiano auténtico desea que Dios llegue también a los demás. “¡Se dice el Señor me necesita! Estoy bautizado, confirmado y soy responsable de que las personas de mi entorno tengan noticia de Dios y “lleguen al conocimiento de la verdad” (1 Tim 2,4b). La madre Teresa empleaba una buena comparación: “A menudo puedes ver cables que cruzan las calles. Antes de que la corriente fluya por ellos no hay luz. El cable somos tú y yo. ¡La corriente es Dios! Tenemos el poder de dejar pasar la corriente a través de nosotros y de este modo generar la luz del mundo -JESÚS- o de negarnos a ser utilizados y de este modo permitir que se extienda la oscuridad”.


La necesidad de compartir la fe, predicar la Palabra de Dios, está representada en este clásico (de autor anónimo) de encuentros y grupos misioneros.

Alma misionera

Señor toma mi vida nueva,
antes de que la espera desgaste años en mi.
Estoy dispuesto a lo que quieras,
no importa lo que sea, tu llámame a servir.

Llévame donde los hombres
necesiten tus palabras,
necesiten mis ganas de vivir,
donde falte la esperanza
donde todo sea triste
simplemente, por no saber de Ti.

Te doy, mi corazón sincero
para gritar sin miedo lo hermoso que es tu amor.
Señor, tengo alma misionera
condúceme a la tierra que tenga sed de vos.

Y así, en marcha iré cantando,
por pueblos predicando, tu grandeza Señor.
Tendré, mis manos sin cansancio,
tu historia entre mis labios, tu fuerza en la oración.

Aquí, la canción en dos versiones. Primero por la Hermana Glenda y, a continuación, por Daniel Poli.





010.- ¿Está dicho todo con Jesucristo o continúa todavía después de Él la revelación?

10.- ¿Está dicho todo con Jesucristo o continúa todavía después de Él la revelación?

En Jesucristo Dios mismo ha venido al mundo. Él es la última palabra de Dios. Oyéndole a él los hombres de todos los tiempos pueden saber quién es Dios y lo que es necesario para su salvación.  [66-67]

Con el evangelio de Jesucristo la REVELACIÓN de Dios está concluida y completa. Para que la comprendamos, el Espíritu Santo nos introduce cada vez más profundamente a la verdad. En la vida de algunas personas entra la luz de Dios de un modo tan fuerte que ven “los cielos abiertos” (Hch 7,56). Así han surgido los grandes lugares de peregrinación como Guadalupe en México y Lourdes en Francia. Las “revelaciones privadas” de los videntes no pueden mejorar los Evangelios de Cristo. Pero nos pueden ayudar a comprenderlo mejor. Estas revelaciones no son vinculantes para todos. Su veracidad es comprobada por la iglesia.



Ariel Glaser ha escrito una gran canción titulada "Cataeko" donde recuerda la raíz griega de la palabra "Catequesis" (katejein: hacer resonar como en un eco).

La letra de la canción explica el sentido de la revelación, cómo ha querido Dios comunicarse con los hombres.

Cataeko

Cataeko, Cataeko, Cataeko.
Catae ko, Cataeko, Cataeko.
Su Palabra resuena en mí.
Su Palabra resuena en mí.
Su Palabra resuena en mí.

La Palabra del Padre
es amor que se entrega
y al salir de su boca
hace al hombre vibrar.
Va de ola en ola
a través de los mares
sube por las montañas
y a las praderas va.

Un día al otro día
le transmite el mensaje,
una noche a otra noche
se lo vuelve a contar.
Del apóstol al hombre
que vivía en su era.
De los que ya nacieron,
a los que nacerán.

Palabra itinerante
va de padres a hijos
y del hijo que crece,
hasta su ancianidad.
Tu misión catequista,
es pregonar el eco
para que todo hombre
pueda a Cristo encontrar.